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Depresión y ansiedad por covid-19
Como resultado del síntoma de cansancio físico y agotamiento, muchos pacientes enfermos por covid-19, presentan síntomas de depresión. Así como síntomas de ansiedad debido al miedo que produce el desconocimiento del desarrollo de esta enfermedad.

La incertidumbre, el miedo y los efectos del confinamiento y la crisis económica, provocan en gran parte de la población, síntomas de depresión y ansiedad. En este artículo se discute sobre las causas, efectos y algunas sugerencias.


Síntomas de depresión:
-Tristeza - Falta de ánimo - Exceso de sueño o ganas de dormir - Insomnio - Dificultad para concentrarse en tareas o el trabajo - Falta de apetito sexual - Necesidad de consumir alcohol para cubrir un sentimiento doloroso - Desconexión de los vínculos humanos - Irritación - Falta de sentido de vida - Ideación suicida - Pérdida de la libido - Falta de apetito o exceso de necesidad de comer

Estos son algunos síntomas de depresión, que enuncio a manera de información general, que te permita pensar si tu has presentado algunos de ellos en los últimos meses.

La pandemia por covid-19 nos ha hecho perder muchas cosas: la libertad de ir a lugares, visitar a familiares y amigos. Sobre todo las actividades lúdico recreativas que daban salida usualmente al estrés de la vida diaria.
Ahora estamos privados de la posibilidad de hacer ejercicio, reírnos juntos en una convivencia familiar y de amigos, relajarse en el cine.
Sin válvulas de escape y sumando la presión por las muertes de personas cercanas, contagios y la incertidumbre ante una enfermedad de la que no se tiene claro los síntomas ni su tratamiento. Nos encontramos como ollas de presión, llenos de tensión emocional.

Esta presión ejerce fuerza sobre las dificultades emocionales que cada persona tenía antes de la pandemia. Por lo tanto, la aparición de enfermedades mentales, el incremento de depresión, ansiedad y distintos comportamientos conflictivos, es una respuesta natural a la crisis.

¿Qué puedes hacer? Definitivamente es necesario conservar la salud física y emocional. Salir a caminar a lugares poco concurridos, al rededor de tu casa en horarios que te de el sol. Realiza caminatas de al menos 20 minutos varias veces por semana.

Habla con amigos y /o familiares de cómo te sientes. No lo lleves tu sólo todo el tiempo.
Busca ayuda profesional si alguno de estos síntomas se agrava o se incrementan.

Escribe un diario, la escritura ayuda a elaborar lo que nos ocurre y la forma en que nos afecta.

Observa tu consumo de alimentos y alcohol, si te mantienes tapando tus emociones, eventualmente van a regresar como una ola y solamente habrás afectado tu salud física al consumir más de lo que tu cuerpo necesita. Sin realmente resolver tus problemas.





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Depresión y ansiedad por covid-19
Como resultado del síntoma de cansancio físico y agotamiento, muchos pacientes enfermos por covid-19, presentan síntomas de depresión. Así como síntomas de ansiedad debido al miedo que produce el desconocimiento del desarrollo de esta enfermedad.

La incertidumbre, el miedo y los efectos del confinamiento y la crisis económica, provocan en gran parte de la población, síntomas de depresión y ansiedad. En este artículo se discute sobre las causas, efectos y algunas sugerencias.


Síntomas de depresión:
-Tristeza - Falta de ánimo - Exceso de sueño o ganas de dormir - Insomnio - Dificultad para concentrarse en tareas o el trabajo - Falta de apetito sexual - Necesidad de consumir alcohol para cubrir un sentimiento doloroso - Desconexión de los vínculos humanos - Irritación - Falta de sentido de vida - Ideación suicida - Pérdida de la libido - Falta de apetito o exceso de necesidad de comer

Estos son algunos síntomas de depresión, que enuncio a manera de información general, que te permita pensar si tu has presentado algunos de ellos en los últimos meses.

La pandemia por covid-19 nos ha hecho perder muchas cosas: la libertad de ir a lugares, visitar a familiares y amigos. Sobre todo las actividades lúdico recreativas que daban salida usualmente al estrés de la vida diaria.
Ahora estamos privados de la posibilidad de hacer ejercicio, reírnos juntos en una convivencia familiar y de amigos, relajarse en el cine.
Sin válvulas de escape y sumando la presión por las muertes de personas cercanas, contagios y la incertidumbre ante una enfermedad de la que no se tiene claro los síntomas ni su tratamiento. Nos encontramos como ollas de presión, llenos de tensión emocional.

Esta presión ejerce fuerza sobre las dificultades emocionales que cada persona tenía antes de la pandemia. Por lo tanto, la aparición de enfermedades mentales, el incremento de depresión, ansiedad y distintos comportamientos conflictivos, es una respuesta natural a la crisis.

¿Qué puedes hacer? Definitivamente es necesario conservar la salud física y emocional. Salir a caminar a lugares poco concurridos, al rededor de tu casa en horarios que te de el sol. Realiza caminatas de al menos 20 minutos varias veces por semana.

Habla con amigos y /o familiares de cómo te sientes. No lo lleves tu sólo todo el tiempo.
Busca ayuda profesional si alguno de estos síntomas se agrava o se incrementan.

Escribe un diario, la escritura ayuda a elaborar lo que nos ocurre y la forma en que nos afecta.

Observa tu consumo de alimentos y alcohol, si te mantienes tapando tus emociones, eventualmente van a regresar como una ola y solamente habrás afectado tu salud física al consumir más de lo que tu cuerpo necesita. Sin realmente resolver tus problemas.


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